Con el calor abrasador del verano, nuestros amigos peludos necesitan cuidados y atención extra para mantenerse seguros y frescos. Con temperaturas que se disparan a altos grados , es crucial tomar medidas proactivas para saber cómo proteger a tu querido perro del calor excesivo.
Desde mantenerlos hidratados hasta prepararles helados caseros, hay varias formas de garantizar su bienestar.
En este artículo, exploraremos estrategias eficaces para salvaguardar a nuestros peludos compañeros del calor sofocante y hacer que su verano sea cómodo y agradable.
Mantén a tu perro hidratado.
Asegurar una hidratación óptima es un factor clave para proteger a tu cachorro del calor excesivo y prevenir los golpes de calor. Ofrece a tu perro varios cuencos de agua colocados en distintas partes de la casa y el jardín para animarle a beber. No olvides llevar un bebedero plegable y una botella de agua a los paseos.
Golosinas heladas son una forma divertida de regular la temperatura corporal de tu perro y satisfacer sus papilas gustativas. Crea bocadillos helados con yogur natural y frutas como sandía o plátano, o llena un juguete Kong con comida húmeda para perros. Vigila a tu cachorro mientras disfruta de su tentempié helado para evitar riesgos de asfixia.
Combate el calor con una hidratación adecuada y a la sombra. Asegúrate de que tu perro tenga mucha agua y acceso a zonas de sombra en el jardín. Una piscina exterior es una forma estupenda de mantener a tu can fresco y entretenido. Tomar estas precauciones ayudará a proteger a tu perro de la insolación, también conocida como golpe de calor.
Prepara helados caseros.
¡Deleita a tu cachorro con helados caseros! Durante los sofocantes meses de verano, estas delicias heladas pueden ser una forma deliciosa y saludable de mantener fresco a tu perro.
Con pleno control de los ingredientes, puedes personalizar fácilmente la receta para adaptarla a cualquier restricción dietética. No sólo eso, sino que hacer helados caseros puede ser una actividad divertida e interactiva para toda la familia.
Prueba a usar yogur, puré de frutas como plátano o sandía, y un chorrito de agua de coco para mayor hidratación. Congela la mezcla en cubiteras o moldes de helado específicos para perros para darle un toque divertido.
El proceso de preparación también puede ser una forma estupenda de estrechar lazos con tu amigo peludo. Invita a tu cachorro a lamer la cuchara y a limpiar el bol de la batidora; ¡incluso puede que le guste añadir trocitos de fruta o verdura para un aporte nutricional extra!
Ten en cuenta que los helados caseros deben servirse con moderación. Demasiada comida fría puede provocar malestar estomacal o congelación cerebral. Además, asegúrate de proporcionar a tu cachorro mucho lugar fresco para que lo disfrute. Con los helados caseros, puedes darle a tu cachorro un capricho refrescante y contribuir a su bienestar general durante los calurosos meses de verano.
Protégelo del sol.
Protege a tu cachorro de los efectos dañinos del sol tomando las precauciones esenciales. Proporcionar zonas de sombra en tu jardín o zona al aire libre, como árboles, sombrillas o una zona cubierta, es una forma estupenda de mantener a tu peludo amigo seguro y fresco.
Además, invertir en un protector solar específico para caninos y aplicarlo en las zonas expuestas, como las orejas, la nariz y el vientre, puede ayudar a protegerlos de las quemaduras solares. Asegúrate de volver a aplicar el protector solar según las indicaciones y evita utilizar versiones para humanos, ya que pueden contener ingredientes nocivos.
Evita las horas punta de calor para proteger a tu perro de los rayos solares. Entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde, el sol es más fuerte, así que es mejor limitar las actividades al aire libre durante este periodo. Intenta planificar los paseos o los ratos de juego a primera hora de la mañana o a última hora de la tarde, cuando la temperatura es más fresca.
Si tienes que estar fuera durante las horas de más calor, busca rutas sombreadas o zonas de hierba por las que pasear, ya que el pavimento puede calentarse mucho y causar quemaduras en las patas de tu cachorro. Además, intenta utilizar equipos protectores, como patucos para mascotas, para proporcionar una capa extra de aislamiento y evitar golpes de calor. Si eres consciente de la intensidad del sol y adaptas las actividades de tu perro en consecuencia, podrás prevenir eficazmente el sobrecalentamiento y garantizar su bienestar.
Refresca el ambiente
Para refrescar a tu cachorro durante los sofocantes días de verano, crea zonas de sombra en el jardín. Coloca sombrillas o cuelga un toldo para proporcionar a tu perro un lugar donde relajarse fuera de la luz solar directa. Coloca ventiladores estratégicamente situados para fomentar una brisa agradable y mantener cómodo a tu compañero canino. Si tienes acceso a una piscina o masa de agua, deja que tu perro se dé un chapuzón para que haga ejercicio y regule la temperatura. A los que no les guste tanto nadar, prepara una piscina infantil con agua fresca para que chapoteen.
Para seguir refrescando su entorno, mantén un ambiente fresco en el interior. Enciende el aire acondicionado o utiliza ventiladores para hacer circular el aire. Coloca toallas mojadas o esterillas refrescantes en sus lugares favoritos para que tengan una superficie fresca donde tumbarse. Para reducir la humedad, utiliza un deshumidificador para que el aire sea menos pegajoso y más confortable.
Además, dale a tu cachorro algunas golosinas heladas para mantenerlo hidratado y entretenido. Haz cubitos de hielo con ingredientes aptos para perros, como caldo de pollo o puré de frutas y verduras, para un tentempié refrescante. No olvides vigilar a tu perro mientras disfruta de su golosina helada para evitar que se atragante.
Moja a tu perro
Mojar a tu compañero canino puede ser una forma estupenda de ayudarle a combatir el calor durante los calurosos meses de verano. Desde mojarle con una manguera hasta llevarle a darse un chapuzón en una piscina o playa aptas para cachorros, esto no sólo ayudará a refrescar su temperatura corporal, sino que también puede ser una actividad divertida para ambos. Sólo tienes que vigilar su jadeo excesivo y asegurarte de proporcionarle suficiente agua fresca para evitar que se deshidrate.
Cuando se trata de aliviar el calor, los juegos y actividades acuáticos pueden ser una forma estupenda de mantener fresco a tu cachorro. Coloca un aspersor o una piscina poco profunda y anima a tu cachorro a vadear y chapotear. Esto no sólo le ayudará a reducir su temperatura corporal, sino que también le proporcionará entretenimiento y estimulación mental.
Incluso puedes congelar golosinas o juguetes en agua y dárselos a tu perro para que los muerda. La sensación de frío les refrescará y les mantendrá ocupados, a la vez que les ayuda a mantenerse hidratados. Siempre que realices actividades acuáticas, supervisa a tu cachorro y garantiza su seguridad.
Conclusión
En conclusión, es crucial tomar las medidas necesarias para proteger a tu perro del calor excesivo. Manteniendo a tu perro hidratado y preparando helados caseros, puedes asegurarte de que tu peludo amigo se mantenga fresco y cómodo durante los calurosos días de verano. Además, proteger a tu perro del sol, refrescar el ambiente y mojar su pelaje son formas eficaces de evitar el sobrecalentamiento.
Recuerda que es nuestra responsabilidad proteger a nuestras mascotas y proporcionarles un entorno seguro y agradable, sobre todo durante los abrasadores meses de verano. Así pues, sé proactivo, mantente alerta y toma las medidas necesarias para proteger al perro del calor excesivo. ¡Tu peludo compañero te lo agradecerá!